Darlo todo por el otro, dejar en un segundo plano nuestras metas para poner a nuestra pareja por delante e, incluso, llegar a pensar que nuestra vida sin el otro no sería nadie, son ideas que distan mucho de una relación sana, ya que se basan en la dependencia, los celos y la posesión. Todo lo contrario a lo que en realidad es saludable.
La mejor combinación para que una relación de pareja sea sana y beneficiosa para ambos incluye estos 10 factores:
1.El cariño y la admiración que los miembros de la pareja se profesan.
2.Los miembros de la pareja no dejan su felicidad en manos del otro.
3.La confianza que tienen el uno en el otro.
4.Se conocen bien.
5.Se muestran respeto siempre.
6.Dialogan sobre los problemas y buscan soluciones que tengan en cuenta a ambos miembros.
7.Tienen su propio espacio, sus metas y sueños.
8.Cada uno tiene su propia forma de ser y de pensar y se respetan.
9.Gozan de una buena comunicación.
10.Fomentan y practican su sexualidad.
Toquemos alguno de estos puntos:
El amor y la admiración
Partimos de la base de que sin amor no hay relación de la que hablar. Pero además, cuando observamos a una pareja que tiene una relación sana, nos damos cuenta de la admiración que se profesan es fundamental. Si no admiramos nada de la otra persona perderemos el interés. Por eso las relaciones superficiales suelen fracasar.
El respeto
No es necesario estar de acuerdo en todo con alguien para respetarlo, respetar sus ideas y sus elecciones. No quiere decir esto que no nos podemos enfadar o discutir, pero no hay que perder el respeto al otro, sino dialogar, en una relación sana, y en la vida en general, el respeto al otro es fundamental.
El diálogo que no es lo mismo que comunicación:
Para tener una relación de pareja sana es necesario dialogar de los problemas que van surgiendo en la relación. No solo comunicar, sino, intercambiar las diferentes ideas para llegar a una negociación, es importante considerar la forma en la que se transmite el mensaje y la manera de recibirlo del otro.
La confianza
Aperturarnos y mostrarnos ante el otro, mejora el conocimiento, el diálogo y nos aporta seguridad. Si no existe confianza es posible que aparezcan celos, miedos y distanciamiento.
La libertad e independencia
Los miembros de la pareja son libres y deben sentirse así. Lo son para elegir estar en la relación y para tomar sus propias decisiones. La dependencia a la pareja o el tener que pedir permiso y aprobación eliminan la libertad y nos impide ser quien somos. Debemos conservar nuestro propio espacio, nuestras metas, nuestros sueños y nuestras opiniones.
Te regalamos algunos puntos que optimizan la relación!!
- Conoce a tu pareja
Saber cómo es su carácter, cuáles son sus inquietudes, sus metas, etc. Saber qué le gusta y qué no. Cómo ha sido su crianza, qué relación tiene con sus familiares y amigos. Cómo suele reaccionar ante los problemas. Cuánto más se conozca una pareja mejor será la comunicación y la relación en general.
- Espacio común y espacio propio
Varios artículos pueden decirte que debes considerar el tiempo individual o el tiempo que pasas con familia o amistades más el tiempo en pareja sin embargo debemos tomar en consideración la dinámica y el espacio donde se desenvuelve la pareja ya que existen temporadas dónde compartas más con tus seres queridos y en pareja lo que disminuiría tu tiempo de individualidad como en otras ocasiones podría ser al contrario sin embargo, lo importante de esto es que siempre fomentes tus relaciones
- Asertividad y empatía en el diálogo:
La forma de comunicarse es fundamental. Cuando queremos expresar algo o mostrarnos en desacuerdo es recomendable usar mensajes yo. Esto es hablar sobre cómo nos sentimos con respecto al tema en cuestión (Yo me siento, yo necesito). No debemos usar mensajes acusatorios (“tú me has hecho”, “tú has dicho”), ni poner etiquetas (“eres un tal”), ni las palabras “siempre” y “nunca” porque suelen ser mensajes que predisponen, a seguir en la riña, y por último, el objetivo es lograr una solución, puedes proporcionar una, ya que no se trata de quién tiene la razón si no de solventar lo que afecta la relación.
- Proyectos de vida
Conviene tener claro la posición de la pareja ante cuestiones como el matrimonio, tener hijos y otras decisiones importantes. No puedes dejar por fuera los proyectos individuales de trabajo y sentidos de vida. Los miembros de la pareja deben caminar en la misma dirección para no limitar los deseos del otro.
- Celos
Hay que mantenerlos a raya. Los celos rompen las relaciones, nos hacen sentir mal a nosotros y a nuestra pareja. Si tienes problemas de celos acude a nuestro artículo de celos en psicoentrena.com
- Cultiva tu relación
Las relaciones hay que cuidarlas. Requieren tiempo y dedicación y un poco de ingenio cuando se vuelven monótonas. Sal de la rutina con ideas nuevas. No olvides hacer sentir bien a tu pareja, demostrarle amor y afecto, escucharle y apoyarle. Esto deben hacerlo los dos miembros de la pareja, los dos debes dar y recibir.
- Pide perdón y perdona
No somos perfectos y cometemos errores. Pedir perdón no es fácil pero sí necesario. Al igual que saber perdonar.
- Terapia de pareja o individual.
Estamos acostumbrados a acudir a terapia únicamente cuando las cosas van mal, pero es interesante acudir cada cierto tiempo para poner sobre la mesa algunos problemas que hayan podido surgir. O simplemente para trabajar algún aspecto de la relación.
- Trabajo en equipo
Una pareja sana trabaja en equipo. Cuando uno de los miembros está más decaído, el otro le anima y lo levanta.
- El sexo
La importancia que cada pareja le da al sexo es distinta. Pero ya sea más o menos importante para vosotros, el hablar sobre sexo con naturalidad y confianza les aportará una mayor conexión y un mejor entendimiento.
¡Vaya! pensarás que es todo un problemón, la realidad es que todo buen proyecto lleva su tiempo de inversión, sea material o emocional, por ello, no es muy distinto que otras áreas de la vida, sacar un título universitario, tener tu propio negocio, construir tu propia casa, o incluso aprender un deporte profesional, es como si deseas sembrar sin abonar la tierra, ni cuidarla, tampoco regarla y pretender tener una buena cosecha; en fin lo que sí tienes que saber, es si realmente una relación en pareja le da sentido y propósito a tu vida, la nutre y la vuelve mejor, ya que cuadra con tu proyecto de vida, recuerda, ser una buena pareja es cuestión de ganas y práctica, porque nadie nace aprendido, hay situaciones de incomodidad que vas a pasar y es por eso que debe de tener mayor valor la relación amorosa, que cualquier incomodidad que implique lograrla.
Anita Rodríguez